martes, 22 de septiembre de 2020

Reseña: Los esclavos perdidos


Título de la obra
: Los esclavos perdidos

Autor: José Rodríguez-Trillo

Género: Terror

Páginas: 508

Enlace de compra: papel (17,67€), digital (0,99€)

Sinopsis: Baltimore, Maryland, 1849.

Un hombre es encontrado vagando entre fuertes delirios y retorcidas pesadillas. En su lecho de muerte habla de unos manuscritos arrojados al mar y de una aterradora verdad oculta…

El cadáver es identificado con el nombre de Edgar Allan Poe.

España. En la actualidad.

El famoso escritor de novelas de terror, William Wilbruck, ha desaparecido. No se encuentra su cuerpo y nadie pide rescate. En el momento de su desaparición tiene en su poder un objeto de valor incalculable…un libro que no existe.

Unos días más tarde, la última persona que pudo verlo con vida aparece asesinada frente a la Catedral de la Almudena junto a una lúgubre inscripción que hace referencia a un demonio antiguo…

La esposa de William, Andrea, desesperada y sin saber qué hacer, pide ayuda a la única persona en el mundo que puede dársela aunque eso signifique volver a abrir la caja azul de los recuerdos que encierra las heridas de un pasado lleno de dolor.

Cuando Dan Rey abre los ojos y comprueba que su viejo compañero y amigo de la infancia, el inspector Sanzt, se abre paso entre la resaca para mostrarle la carta, sabe que una vez más el destino ha movido sus hilos y él va a volver a bailar a su antojo.

“Una canción más, cabrón”.

Se trata del amor de su vida, la mujer que le había partido el corazón.

“Lógico”

Siempre se ha tratado de ella.

Ahora, él, una vieja gloria en su décimo año de retiro, es su única esperanza.

“Puta ironía”

Dan había cometido muchas estupideces en su vida, pero embarcarse en aquel caso para encontrar al hombre por el que su primer y único amor le había abandonado, estaba a punto de ser la más peligrosa y aterradora de todas…


He conseguido sacar un pequeño hueco entre firma y firma para escribir esta reseña, del último libro que ha pasado por mis manos. Hacía tiempo que quería leer a José Rodríguez-Trillo, y le coloqué después de Stephen King, no sin cierta intención. El resultado ha sido una de esas lecturas que no te suelta hasta que consigues terminar con su última página.

Para empezar, una pequeña anotación. Los esclavos perdidos no es un libro que se ande con medias tintas. Se trata de una novela de terror, MUY explícita en algunos puntos de la misma. Yo no tengo ningún problema, y aun así, en determinadas escenas, se me han removido las tripas, así que coincidiremos que no es una novela apta para todos los estómagos. Este es un aspecto que puede disuadir a algunos lectores, pero que, sin duda, habla en favor de la novela para quien guste de este tipo de lectura.

A pesar de lo dicho en el último párrafo, el amor es uno de los ejes sobre los que gira la trama. La historia de amor entre Dan Rey y su primer —y único— amor, Andrea —ahora— Wilbruck copa el centro de la historia. Del amor y el desamor, del engaño y desengaño, del ahora sí y ahora no. Del vivir o morir. De todo eso y de mucho más trata Los esclavos perdidos.

El otro punto cardinal de la novela es Edgar Allan Poe. Su vida y su muerte, y todo el misticismo demoníaco que le siguió en los últimos años de su vida. Nos internaremos en sus escrituras, analizaremos sus manuscritos y viajaremos hasta el mismísimo infierno, en la sempiterna lucha entre el bien y el mal.

Los giros de guion serán claves e inesperados, y los personajes que parecen planos pero que no lo son. Y es que los personajes son otro de los puntos fuertes en este libro. El grupo de amigos que sobrevivió a una tragedia en el colegio y que se reencuentra, años después. Cada uno ha tomado su camino, sus propias decisiones, que les han llevado a confeccionar personalidades de lo más variadas.

Tenemos antagonistas, sí señor. Tenemos a la mismísima representación del diablo sobre La Tierra, que perseguirá a nuestros protagonistas a lo largo y ancho del planeta. 

Pero también tenemos EL PERSONAJE. Esta novela tiene suficientes motivos para ser leída por sí sola, pero es cierto que la presencia de Dan Rey le otorga ese extra, ese plus que siempre se necesita para que el trabajo sea redondo. El expolicía se nos presenta como un héroe contemporáneo, de carne y hueso, con sus luces y sus sombras. En efecto, una sombra de lo que fue, pero una sombra alargada, y capaz de cualquier cosa por amor.

En definitiva, en Los esclavos perdidos tenéis una novela oscura y misteriosa, en la que no tendrás las piezas necesarias para resolverla hasta la última página. Si este tipo de novela es la tuya, no pierdas el tiempo y léela.

No hay comentarios: